Afortunadamente existen tres magníficos obituarios sobre Javier Alfaya que están en el diario El País y se pueden leer con facilidad *. Yo no voy a descubrir al grandísimo escritor, crítico y hombre sabio, además de bueno, que fue; quiero destacar su compromiso con la Música, con mayúsculas, la Gran Música, la que se escribe pensando, reflexionando, con memoria del pasado.
Javier Alfaya fue un hombre de izquierdas, siempre leal y activo; fue una inteligencia crítica en el amplio sentido. Su pensamiento progresista y librepensador lo llevó a un mundo, el de la Música, que todavía hoy sigue siendo en muchos aspectos antiguo y cortesano. En ese mundo, supuso un soplo de aire fresco por no decir un huracán de oxígeno: fundó la revista musical Scherzo, dirigió sus ediciones junto con la Librería Antonio Machado e impulsó algunos de los Ciclos que se celebran en el Auditorio Nacional, entre muchas otras actividades vinculadas a la música y a su dignificación en una sociedad como la nuestra que la ignora, en el mejor de los casos.
El concierto del próximo lunes 26 de febrero, perteneciente al XXIII Ciclo de Grandes Intérpretes de la Fundación Scherzo, en el Auditorio Nacional, estará dedicado a su memoria, con el pianista Grigory Sokolov. Esperemos que éste sea el primero de una larga serie de conciertos dedicados a honrarle, pues la música en nuestro país le debe demasiado: compromiso con los olvidados, compromiso con los silenciados por el franquismo, compromiso con las vanguardias, compromiso con el pensamiento crítico. Pero sobre todo, la Música le debe el honor de haber tenido a su lado a un verdadero intelectual, a un editor y promotor que amaba la gran música, sin concesiones ni complacencias.
Conocí a Javier cuando me entrevistó en 1994 para Scherzo con motivo de la que es mi primera ópera, “El Cristal de Agua Fría”, con libreto de Rosa Montero. Nació inmediatamente una enorme amistad que ha durado hasta el final de su vida. En 2012 tuve la fortuna de poder estrenar “Tres poemas de Javier Alfaya” -mi particular homenaje a Javier- con la gran Elena Gragera y el no menos grande Antón Cardó; elegí para voz y piano tres de sus más bellos poemas: Pasaje Término, Elegía sine nómine y Luis Lucio Lobato in memoriam.
La Música ha perdido un intelectual íntegro, yo he perdido un amigo.
Marisa Manchado Torres
* https://elpais.com/cultura/2018/01/29/actualidad/1517255702_876341.html
Jesús Ruiz mantilla
https://elpais.com/cultura/2018/01/30/actualidad/1517339502_848872.html
Luis Suñén, que fue director hasta 2016 de la revista Scherzo
https://elpais.com/cultura/2018/01/30/actualidad/1517340224_540300.html
José María Guelbenzu
Publicado en la revista SCHERZO, febrero 2018